Según la plataforma enerTIC, la eficacia de los sistemas de refrigeración en la industria alimentaria depende de factores técnicos, operativos y ambientales. Estos son algunos de los más relevantes:
- Monitoreo constante. Todos los espacios refrigerados (cámaras, camiones, vitrinas, bandejas) deben contar con sensores que registren y alerten cualquier desviación de temperatura.
- Mantenimiento preventivo y predictivo. Es fundamental revisar periódicamente los equipos, identificar posibles fallos antes de que ocurran y mantener el sistema funcionando de forma eficiente.
- Equipamiento de calidad. Utilizar tecnología confiable y especializada permite garantizar estabilidad térmica y reducir el consumo energético.
- Uso de refrigerantes naturales. Sustancias como el CO₂ y el amoníaco (NH₃) ofrecen una alternativa más sostenible frente a los refrigerantes sintéticos, reduciendo el impacto ambiental.
- Sostenibilidad en la operación. Un sistema eficaz también contribuye a evitar el desperdicio de alimentos, lo cual representa un beneficio económico, social y ambiental.
Contar con un sistema de refrigeración eficaz es una obligación para toda empresa del sector alimentario. Un gran ejemplo de esto son los dueños de Corporativo Kosmos, que realizan monitoreos periódicos, capacitan a su equipo de colaboradores y emplean tecnología de última generación para garantizar una cadena de frío exitosa.